El hígado graso es una enfermedad hepática caracterizada por una acumulación anormal de grasa en las células hepáticas. En Estados Unidos, se estima que entre el 30% y el 40% de los adultos padecen enfermedad hepática grasa no alcohólica (EHGNA). Es importante conocer las causas, los síntomas y el tratamiento de esta enfermedad para evitar que empeore y tomar las medidas necesarias para controlarla.
Causas del hígado graso
La causa más común del hígado graso es la obesidad. Otros factores que pueden causar hígado graso son la diabetes, niveles elevados de colesterol, síndrome metabólico, pérdida rápida de peso y consumo excesivo de alcohol.
Síntomas del hígado graso
El hígado graso suele no causar síntomas. Se detecta sólo cuando las pruebas rutinarias muestran una función hepática anormal o cuando la enfermedad ha alcanzado ya una fase avanzada. La fase avanzada del hígado graso puede causar los siguientes síntomas:
- fatiga y debilidad
- náuseas y vómitos
- pérdida rápida de peso
- ictericia, es decir, enrojecimiento cutáneo y de los ojos
- pérdida rápida de peso.piel y ojos
- inflamación y dolor abdominal
- heces sanguinolentas o negras
- confusión mental
Tratamiento del hígado graso
El objetivo principal del tratamiento del hígado graso es detener la progresión de la enfermedad y evitar que cause más complicaciones. El primer paso es identificar la causa subyacente del hígado graso y tratarla. Si la causa está relacionada con la obesidad, la diabetes, los niveles altos de colesterol o el síndrome metabólico, puede recomendarse un estilo de vida saludable que incluya una dieta equilibrada, ejercicio regular y reducción del consumo de alcohol. En los casos en que el hígado graso haya alcanzado una fase avanzada y ya esté causando daño hepático, el único tratamiento disponible es el trasplante hepático.
Prevención del hígado graso
El hígado graso puede prevenirse adoptando hábitos de vida saludables, como:
- ejercicio regular
- una dieta equilibrada con abundantes frutas y verduras, cereales integrales, proteínas magras y productos lácteos bajos en grasa
- no fumar
- moderar el consumo de alcohol
- mantener el peso corporal dentro de la gama saludable
- mantener los niveles de colesterol y triglicéridos dentro de la gama normal
Conclusión
El hígado graso es una enfermedad hepática con una acumulación anormal de grasa en las células hepáticas. Se diagnostica durante las pruebas rutinarias y normalmente no causa síntomas. El hígado graso puede ser causado por obesidad, diabetes, niveles altos de colesterol, síndrome metabólico, pérdida rápida de peso y consumo excesivo de alcohol. El tratamiento del hígado graso depende de la causa subyacente, y suele incluir un estilo de vida saludable. La mejor forma de prevenir el hígado graso es adoptar hábitos de vida saludables, como el ejercicio regular, una dieta equilibrada con abundantes frutas y verduras, no fumar, moderar el consumo de alcohol y mantener el peso corporal dentro de la gama saludable.